El Dios de mi fe gusta recrearse
Caminando junto a sus hijos
Por jardines floridos
Y aromas a verdes
campos
Él es la sinfonía
Que no podemos
Dejar de escuchar
Melodía celeste que arrulla e invita
Despejar angustias, dolor y dudas,
Arrullo liberador, meditación profunda .
Aire místico que abraza al caminante
Quien contempla la tierra
Con la luz de la fe
Se asombra, alegra y libera
Se descubre ave,
Se descubre viento
Se descubre río y mar
Se descubre semilla y
pasto
Se descubre flor.
Agua viva recorre
Las venas de su espíritu
Divino fluido nutre a su esencia
Abandona su antiguo hospedaje
Y cruza el umbral de las mil promesas
Con los pies descalzos
comienza a caminar
Respirando sanación
Causa y efecto de la oración
Su templo abre ventanas
En el altar
Resplandeciente
Del amor
Palabra divina
Habla en su interior.
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